El subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo, renunció a su cargo luego de la polémica que generaron sus dichos sobre las filas en los centros asistenciales, por la cual incluso representantes del oficialismo le instaron a dar un paso al costado.
Durante la jornada, Castillo incluso pidió disculpas por sus dichos diciendo que no expresó lo que quería realmente decir.
En su carta entregada al presidente Sebastián Piñera, a la cual tuvo acceso Radio Bío Bío, presentó su “renuncia indeclinable” al cargo que desempeña desde agosto del 2018.
“Aprovecho esta misiva para agradecer la confianza depositada en mi persona, como así también el hecho de que me haya permitido tener la oportunidad de participar en el diseño de políticas públicas que apuntan al directo beneficio de la salud de millones de chilenas y chilenos”, sostuvo Castillo.
A esto, agregó que “espero haber contribuido a la ejecución de una mejor salud para ellos y haber implementado una mirada renovada y ejecutiva, de cómo hacer llegar más y mejor salud, a nuestros compatriotas”.
Además de la más reciente polémica, Castillo ya había estado en la mira por otros casos, algunos de los cuales le perseguían desde antes de asumir por primera vez su cargo, durante el primer mandato de Sebastián Piñera.
Encuentros sociales
“Los pacientes siempre quieren ir temprano a un consultorio. Algunos de ellos, una fracción de ellos, porque no solamente van a ver al médico sino que es un elemento social, de reunión social”, dijo Castillo durante una entrevista con Radio Santa María de Coyhaique.
Buscando clarificar sus dichos, Castillo expresó a través de su cuenta de Twitter que “pido disculpas, si a través de mi comentario no expresé lo que realmente quise decir”.
“En esa instancia fui enfático en plantear que la situación es indigna, no obstante, hoy trabajamos para que en el corto plazo esta situación que ocurre en las salas de espera de diversos Centros de Salud Familiar a nivel nacional cambie y así el proceso de toma de hora, se lleve a cabo de la manera más óptima posible, en beneficio de nuestros usuarios de la red”, aseguró la autoridad.
A través de un comunicado, agregó que sus declaraciones “no reflejan, bajo ningún punto de vista, mi parecer respecto de una realidad dolorosa que como profesional de la salud y funcionario público, conozco en detalle desde hace muchos años”.
“Reconozco el error respecto de mi comentario, el cual debería haber apuntado a la generación de un cambio cultural, que debe ir de la mano con la implementación y desarrollo de herramientas que, cada vez más, permitan a las personas acceder a una atención digna y oportuna de salud, sin exponerse a largas horas de espera”, sostuvo el subsecretario.
Rechazo transversal
Una respuesta inmediata tuvieron sus palabras desde el alcalde de Coyhaique, Alejandro Huala, quien apuntó contra Castillo: “Aquí subsecretario, la gente no va a hacer vida social, para eso tenemos las casas. Lo que se va a hacer ahí es tratar de tener atención en un servicio que es tan importante como la salud y ahí la responsabilidad es de usted”.
“A nadie se le ocurriría, con cinco o seis grados bajo cero, estar haciendo vida social a la intemperie y esperando que le abran las puertas para poder ingresar y tener algo de calefacción”, disparó.
Sus dichos fueron respaldados por el vicepresidente de la Asociación Chilena de Municipalidades (ACHM) y alcalde de La Granja, Felipe Delpin, quien le emplazó a pedir disculpas y recordó que “más del 90% de los vecinos del país se atienden en los consultorios. Entonces decir que se va a hacer vida social con frío, dolores y hambre, es bastante inhumano”.
El presidente de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, el PPD Ricardo Celis, calificó las palabras como “incomprensibles, agresivos, burlescos y denotan una falta de consideración y de conocimiento de lo que está ocurriendo en la salud pública enorme”, yendo más allá e instándole a “dar un paso al lado para facilitar las tareas al ministro Mañalich, porque lo único que ha hecho es entorpecer su labor”.
“Habíamos pensado poder levantar ese veto que tenemos en la Comisión de Salud porque dificulta la labor del ministro, pero con estas expresiones de ninguna manera lo vamos a repensar”, sostuvo el parlamentario.
El diputado de Renovación Nacional Andrés Celis también le instó a renunciar, argumentando que “un subsecretario de Redes Asistenciales no puede decir que en un consultorio la gente va a hacer vida social y me parece que tiene que dar un paso al costado. Esta es la gota que rebalsó el vaso”.
Acotó que “los dichos del subsecretario le hacen un tremendo daño a Chile Vamos, pues no reflejan en absoluto el sentir y la sensibilidad social del Gobierno”.
Su correligionario, el diputaod Jorge Duran, también pidió la renuncia de Castillo por el bien del Ministerio de Salud, sosteniendo que “el ruido sobre el señor Castillo, su gestión y su forma de ser superaron todo lo aceptable. No puede seguir en el cargo”.
“Su permanencia en el cargo, es fruto de la respiración artificial. Es momento que sea desconectado”, acotó.
Diputados UDI lo respaldaron
A contramano, Castillo fue defendido sin embargo desde la Unión Demócrata Independiente, luego de que el diputado e integrante de la Comisión de Salud, Javier Macaya, apuntara contra sus críticos argumentando que “acá hay varios que prefieren que la salud pública no funcione a cambio de darse un gustito político”.
Jaime Bellolio, en tanto, respaldó a Castillo ante La Tercera agregando que “quienes hemos visitado consultorios desde hace mucho tiempo” han visto diferentes escenarios, como que “hay personas que tienen muy pocas redes, que a veces están muy solas, que sí efectivamente pueden encontrarse en consultorios. Pero no es que vayan allá a hacer vida social, no es que vayan a ocupar espacios”.
“No sé dentro de qué contexto lo dice, pero evidentemente los consultorios son un lugar de atención primaria de salud y eso no es ninguna reunión social”, planteó.
Por su parte, la ministra vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, le bajó el perfil a sus palabras planteando que “fue una frase desafortunada que el propio subsecretario se ha dado cuenta y que ha pedido disculpas hace poco rato atrás en su cuenta de Twitter”.
Siempre en el ojo de la polémica
Desde la oposición pidieron su renuncia desde el instante en que tomó el liderazgo de la subsecretaría de Redes Asistenciales en el actual mandato de Sebastián Piñera, puesto que también ostentó durante todo el primer período del presidente.
En concreto, criticaron el historial de polémicas en que su nombre ha aparecido involucrado, partiendo por la investigación para esclarecer la muerte del expresidente Eduardo Frei Montalva.
En este caso se le acusa de -cuando se desempeñaba en el Hospital Clínico de la Universidad Católica- de negar la existencia de un registro de la autopsia, pese a que uno de los médicos que la realizó afirmó que Castillo la guardaba en su escritorio.
Las críticas más enfáticas vinieron desde la Democracia Cristiana, de hecho, su presidente Fuad Chahín exigió que el Gobierno revierta este error y lo remueva del cargo.
El nombre de Luis Castillo también ha aparecido en otros casos, como el de la reducción artificial de las listas de espera en el Hospital San José en el año 2013, período en que Castillo estaba en el cargo; así como el de la construcción del Hospital de Rancagua, recinto inaugurado en 2016 y por el que hoy existe una investigación por cohecho y malversación que aún se encuentra en desarrollo.
Más tarde, durante el presente año, Castillo fue acusado de ordenar vía Whatsapp despidos y sanciones a funcionarios del Servicio de Salud de Atacama por razones políticas.
