Historia.

 

 

Historia de Tomeco.

En lenguaje indígena significa “agua de totora” y es el poblado que vio nacer al toqui Butapichun, el cual lidero la gran sublevación de Chillán en el año 1655 y que le dio paso a la historia de del santo San Sebastián, ya que debido a la destrucción de la gran parte de Chillán los soldados españoles se vieron en la necesidad de sacar la estatuilla y esconder en Yumbel. Tomeco es famoso por ser un rustico poblado  que formo parte de la hacienda de Tomeco que estuvo bajo el mando del gobernador Alonso de Córdova y Figueroa y luego paso a cargo de hijo Pedro Pascual de Córdova y Figueroa en 1747. Actualmente este pequeño poblado cuenta con la fiesta tradicional del camaronazo festejada en Agosto y la fiesta del Cordero festejada en Diciembre, además de una pintoresca plaza y una parroquia en lo alto del pueblo, cuenta con un colegio que disfruta de una moderna infraestructura , una posta, un retén de carabineros, una pulpería de antaño y cementerio. Es un lugar perdido en el tiempo donde el Turista puede disfrutar de una paz y armonía absoluta con bellos parajes que bordean el poblado e incontables historias y leyendas de personajes míticos y apariciones, este poblado cuenta con comerciantes activos de chicha, tinajas de greda, frutas de la temporada y rico vinagre de campo.

                                  

 Historia de Rere

 

De nombre originario Rere, debido a que los indígenas de la zona lo nombran de esa forma debido a la abundancia de pájaros carpinteros en el sector que hoy se emplaza la ciudad.              

La historia de Rere, se remonta a su fundación como fuerte español  el 24 de Diciembre de 1586, por el gobernador Alonso De Sotomayor y bajo el nombre de Villa de Nuestra Señora de Buena Esperanza de Rere. Unos cuantos años luego en el 1603, el Gobernador Alonso de Rivera la rebautiza con el nombre de Estancia Del Rey, debido a su importancia como fuente generadora de alimentos para la tropas españolas establecidas en el sur, en ese mismo año finalmente se lleva a cabo la construcción del fuerte de Nuestra Señora de Buena Esperanza, debido a la imperiosa necesidad de proteger los sembradíos y animales de los indígenas, que por costumbre, tendían a robar y quemar todo a su paso, es así como Rere paso un período de más de cien años, siendo el punto neurálgico de Chile, ya que su objetivo estratégico era alimentar a las tropas del Rey y ejército del imperio español,  las cuales tenían por misión conquistar y convertir al catolicismo a los nativos de Chile, sin embargo, debido a su ubicación estratégica Rere tuvo la capacidad de adaptarse a la necesidades de los españoles, logrando posicionarse en el tiempo como el principal punto de resistencia española en la región. En el año 1752, el gobernador Domingo Ortiz de Rozas, volvió a cambiar el nombre de Rere, con el objetivo de dejar un recuerdo de su paso en la histórica, sin embargo, el nombre de Villa Buena Esperanza de Rozas, duro corto tiempo en funcionamiento hasta la llegada del gobernador en 1765 Antonio de Guill y Gonzaga, decide volver a cambiar el nombre, ya que Rere no cumplía ya con las exigencias para seguir funcionando como fuerte, por lo que también antepone su nombre a la localidad quedando con el nombre de Villa San Luis de Gonzaga de Rere, este fue el nuevo punto de partida, ya que se dan por finalizadas las actividades militares y se expulsan a los jesuitas establecidos por más de ciento cincuenta años, sin embargo, eso no fue motivo de declive en su actividad económica o crecimiento.

Cabe mencionar algunos hechos de relevancia histórica, tales como; que en el año 1612 se establecieron en Rere la misión jesuita, lo cual provocó el desarrollo intelectual y espiritual de la localidad, además de traer múltiples ventajas, como la creación de la primera iglesia solo dos años después de su llegada y la creación de un colegio en 1641, incluso llego a existir un observatorio y reloj solar los cuales perecieron en el levantamiento indígena de 1655, que casi destruyo Rere por su totalidad. En el año 1720 se funden las campanas por el cual hoy en día es conocido, con un 13% de oro total, y fundida gracias a las donaciones en joyas de oro, plata, y bronce de los residentes del poblado y quince años más tarde se establece en Rere el célebre Padre Mayoral, a pesar de la expulsión de los jesuitas y la partida de los españoles Rere fue capaz de sostenerse firmemente como una gloriosa ciudad, en la cual existía una gran actividad diaria, es por eso que en 1786 se crea finalmente el Departamento de Rere con la capital de San Luis de Gonzaga, y posteriormente surge la llamada “Fiebre del Oro”, al descubrir las minas de Matamala, esto provoca un aumento en la población de Rere, y un esplendor económico como ninguna otra ciudad tuvo, es así como se decide crear el banco de Rere en 1889, siendo el tercero en la zona, y uno de los pocos que contaba con sus propias monedas y billetes, ese mismo año, por la cantidad de población que sostenía la ciudad se crea en cementerio municipal, por consecuencia, el oro había de terminarse en algún momento y Rere no fue la excepción a esa regla, eso provoco un fuerte declive  en la economía fructuosa de la localidad, y posterior olvido, la gente que había venido por el oro, volvió a sus tierras y solo quedaron los que se habían enamorado de la ciudad, eso dio paso al tiempo y el tiempo al olvido.