El Terreno
Al tener conocimiento del avance de los aliados
hacia el norte, el Coronel Sotomayor resolvió inicialmente, presentar
combate en las llanuras de Santa Catalina; pero más tarde, cambió su
resolución debido
a la disminución de sus fuerzas motivada por el envío de una
columna hacia la quebrada de Tana. Eligió como posición defensiva
las alturas del cerro de San Francisco, las que, por sus condiciones topográficas
favorables a la defensa, podrían compensar su inferioridad numérica.
El cerro de San Francisco, de aproximadamente 200 metro
de altura se extiende de N.O. a S.E. en unos 800 metros
más o menos; con dos morros en sus
extremos que dan una completa visibilidad. Las laderas son suaves, siendo las
del lado sur más pendientes y, por lo tanto, más difíciles
de subir. Al norte de él se encuentran Dolores, el cerro de los Tres
Clavos, el pozo de Dolores y la Encañada.
Ocupación de la Posición
Defensiva
El 18 en la tarde, el coronel Sotomayor pidió al
general Escala que se le devolvieran las fuerzas enviadas hacia Tana
y ordenó la
inmediata ocupación de la posición defensiva.
a) Organización de la posición
de infantería
Ala este: Regimiento 3° de Línea; al mando del
coronel Castro.
Centro : Batallones Atacama, Coquimbo y Regimiento 4° de Línea;
al mando del coronel Amunátegui.
Ala Oeste : Batallones Navales, Valparaíso y Regimiento Buín,
al mando del coronel Urriola.
b) Artillería
Se organizó en cinco grupos a lo largo de la posición
y en Dolores.
c) Caballería
Cazadores a Caballo y una compañía de Granaderos, quedó en
la Encañada como reserva en condiciones de concurrir hacia cualquier
lugar del frente de combate
Despliegue Estratégico Aliado
a) Objetivo
Envolver la posición chilena, por ambos flancos,
para converger sobre el pozo de Dolores.
b) Ala este
Formada por la División Exploración, la IV División peruana
y la 1 División boliviana. Bajo el mando directo del general Buendía
atacaría por el este para conquistar pozo de Dolores (5.057 h.).
c) Ala oeste
Al mando del coronel Suárez tendría como misión atacar
de sur a norte, rebasando el ala oeste chilena para penetrar en la Encañada
en dirección a pozo de Dolores. Integrada por las l y III Divisiones
peruanas y la II División boliviana (4.285 hombres).
d) Reserva
Al mando del coronel Cáceres e integrada por los
Batallones Zepita Dos de Mayo.
e) Caballería
Cuando se le ordenara, avanzaría por cualquiera
de los flancos, para cortar la retirada de las fuerzas
chilenas en derrota.
f) Iniciación del ataque
El general Buendía resolvió iniciar el ataque al amanecer del
día 20 de noviembre.
Desarrollo de la Batalla
a) Primera fase
A las 15,30 horas del 19 de noviembre, se inició la acción de
fuego entre la artillería peruana de Porvenir y la chilena del comandante
Salvo. Esto contravino las disposiciones del general Buendía que tenía
decidido no atacar hasta el día 20.
Ante esta circunstancia imprevista, el ala E. aliada, inició un avance
por el E. del cerro San Francisco y destacó cuatro compañías
para atacar directamente las posiciones de la agrupación de artillería
de Salvo.
Estas cuatro compañías al mando del general boliviano Villegas,
iniciaron el ataque ganando duramente el terreno defendido en forma tenaz por
los 65 artilleros chilenos. Algunas tropas del Atacama actuaron en apoyo de
los artilleros y, en conjunto, se logró rechazar el asalto; pero, reforzadas
las compañías enemigas, reemprendieron la acción. Un ataque
a la bayoneta de mayores fuerzas del Atacama, cayendo sobre el flanco, contuvo
definitivamente el impulso atacante.
b) Segunda fase
Mientras se producía la acción en el centro, el general Buendia
continuó su avance, pero fue detenido por fuego artillero chileno, desde
pozo de Dolores y por un violento contraataque de una compañía
del 3° de Línea al mando del capitán Chacón.
El ataque aliado en el ala Oeste también fue rechazado, después
de repetidos e infructuosos asaltos; las tropas se retiraron del frente tratando
de buscar su salvación; duros contraasaltos chilenos impidieron que
estas retiradas se efectuaran en forma ordenada.
Como ni la reserva ni la caballería fueron empleadas por el general
Buendía, que estuvo más preocupado de comandar el ala este que
el total de las fuerzas, según le correspondía en su calidad
de Comandante en Jefe, las tropas en retirada no tuvieron el más mínimo
apoyo y, prácticamente, la acción se convirtió en una
desbandada.
c) Tercera fase
El coronel peruano Suárez, dándose cuenta del desastre, asumió el
mando de algunas fuerzas peruanas en Porvenir y con ellas contuvo al resto
que huía desordenadamente; el general Buendía ya se había
retirado con su Cuartel General hacia Tarapacá.
La energía y decisión de Suárez lograron contener gran
parte de las tropas y reuniéndolas pudo iniciar una ordenada marcha
de retirada hacia la quebrada de Tarapacá.
A las 17 horas el combate había terminado y los chilenos quedaron dueños
del campo de batalla; pero por órdenes superiores, no se inició de
inmediato una persecución que habría significado el término
de la campaña y habría evitado la desastrosa acción de
Tarapacá. |
|