24 de Enero de 1939. Terremoto de Chillán

 

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Calle Barros Arana 1939

 

El martes 24 de Enero de 1939 a las 23 35 hrs. un violento terremoto llenó de pavor y muerte la aún colonial ciudad de Concepción. El remezón lento en un comienzo, fue creciendo rápidamente hasta alcanzar una violencia tal que hizo desplomarse las viejas casas de adobe y los más modernos edificios. En el Teatro Concepción había una función y la inmensa lámpara de lágrimas que pendía desde el techo sobre la platea, comenzó a moverse y los gritos de pavor siguieron a la oscuridad absoluta, mientras el piso se sacudía. En el sector de galerías, cuando el público trató de descender hacia la calle Orompello, la escalera de caracol se tronchó y muchos cayeron al vacío. El terremoto pareció eterno. "Acabo de mundo para muchos". Después de casi tres minutos de pánico sobrevino la calma. En las horas siguientes al sismo ya se disponía de un informe preliminar: más de 25.000 muertos y miles de heridos. En la esquina de O’ Higgins con Anibal Pinto se amontonaron los cadáveres, que eran llevados en camiones hacia el cementerio, allí se habían abierto grandes zanjas, de una cuadra de largo, donde eran enterrados unos sobre otros. Con una población privada de los elementos más indispensables (agua, víveres, techo, ropas, remedios, etc.), las primeras disposiciones fueron dotar a los aterrados penquistas de lo más necesario. La energía eléctrica no volvió en toda la noche. Del cielo sólo se obtenía el siniestro reflejo rojo de los incendios declarados en distintos puntos de la ciudad, ni en varios días más. Sólo se escuchaban lamentos y gritos pavorosos clamando el nombre de familiares por si aún estaban con vida entre los escombros. El agua potable también quedó suspendida. El terremoto fue seguido por frecuentes temblores durante toda la noche. En vela, en los patios de las casas o en las plazas de la ciudad, la población debió esperar el amanecer para tener una visión de lo ocurrido y rescatar los cuerpos de sus seres queridos, atrampados por adobes, ladrillos, vigas y techos desplomados.

En los días anteriores al terremoto, Concepción contaba con cerca de 87 . mil habitantes que vivían en 15.000 viviendas, de éstas, el 95% quedó seriamente afectada. Graves daños sufrió la Empresa de Ferrocarriles del Estado en su vía férrea, lo mismo que importantes obras de arte, túneles, etc. El puente sobre el río Itata en Coelemu estaba en peligro de caer siendo temerario su tránsito por él. Los daños materiales se estimaron en aproximadamente 3 mil millones de pesos de esa época.

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Tronadura de las torres de la Catedral debido a su inestabilidad

Junto con la destrucción y pérdida de vidas humanas, el terremoto de 1939 significó para Concepción el término de una forma de vida. La ciudad ya no recuperaría su rostro provinciano, ni tampoco la antigua manera de ser de sus habitantes, en sus actividades y costumbres. El Concepción del sur, la capital de la frontera había perdido para siempre su antiguo rostro. Destacaban entre sus construcciones lo que un día se llamó el Palacio de La Scotta, que estaba en Caupolicán entre San Martín y Cochrane, diseñada por un arquitecto de Santiago al estilo del 1900. Otra construcción importante fue el Castillo Zulaica, construido por Nicasio Zulaica y Caviedes para que se fueran a vivir allí las Siervas de Jesús. Estaba ubicado en calle Las Heras. La intendencia se quebró en varios sectores y el correo de O’Higgins casi esquina con Anibal Pinto, se desplomó totalmente. El Mercado Municipal de Caupolicán se cayó estrepitosamente. Frente a la Plaza Independencia, las dos torres de la Catedral se bamboleaban peligrosamente lo que obligó a su demolición.

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Edificación en Concepción antes y después de 1939

Las causas del sismo se deben a una ruptura de la Placa de Nazca. El sismo no estuvo relacionado directamente al contacto de las dos placas, siendo intraplaca con fallamiento normal. El terremoto tuvo una magnitud de 8 grados en la escala de Richter y el epicentro se encuentra cerca de Quirihue a unos 100 km de profundidad. La falla tuvo una extensión de 100 km y rumbo N40ºE e inclinación entre 60º-80º al Este (Beck et al.1998). El proceso de ruptura no es muy común ya que aparte de ser intraplaca, es decir, no relacionado directamente por la fricción de dos placas, el sismo fue producto de esfuerzos extensionales que quebraron la placa oceánica en profundidad. Producto de este proceso, se produjeron cambios topográficos, como la elevación de un metro de la Cordillera de la Costa en relación a la Planicie Litoral donde se encuentra Concepción. A su vez, la Depresión Central subió un metro en relación a la Cordillera de la Costa en el área de Quillón. Esto indicaría que las fallas que limitan el bloque (horst) de la Cordillera de la Costa, se encuentran activas. En relación a las intensidades, pudo percibirse desde Arica a Aisén, esto porque fue un sismo profundo que permite una mayor percepción territorial. En la escala de Mercalli Modificada, el terremoto tuvo las siguientes intensidades: Arica III, Iquique y Antofagasta IV, La Serena VI, Valparaíso, Santiago y Rancagua VII, Talca VIII, Parral IX, Cauquenes, Quirihue, Bulnes y Concepción, X; Chillán XI, Arauco IX, Los Angeles y Angol VIII, Temuco VIII, Valdivia VI, Puerto Montt V y Aysén IV.

Fue en Chillán donde se produjo la mayor intensidad y mayores daños, provocando la destrucción completa de la ciudad, por lo que se conoce este terremoto como "Terremoto de Chillán del 39".

 

 

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